Sobre los transportines para gatos

Publicado en el Blog Promiau, de Bayer, en enero de 2016

A pesar del furor que ha generado la salida al mercado de estos trasportines similares a un cohete, hay que tener en cuenta las características y necesidades propias de nuestro gato antes de pensar en adquirir uno. A juzgar por las fotografías que circulan en las redes sociales, esta moderna forma de sacar a las mascotas de paseo se está popularizando con tal rapidez que al parecer algunos propietarios de felinos no se han detenido a pensar si realmente es la más adecuada para un gato.

Para despejar las dudas, hemos conversado con la especialista en Etología  Rosana Álvarez, de la Clínica Etología Veterinaria ubicada en Málaga, quien nos explica que, debido a las características generales de la especie, para los gatos “no es cómodo ser transportados a ningún sitio en ningún tipo de artilugio, recipiente o transportador”. La realidad es que este tipo de situaciones generan estrés en el animal.

Comportamiento felino

Para los gatos, como lo aclara la especialista, la idea de tranquilidad se relaciona con un espacio conocido, el cual consideran su territorio. Por esta razón, mientras menos paseos y salidas experimenten, más cómodos estarán. Otro detalle a considerar es la sobreexposición al medio externo, una vez que las salidas se hacen inevitables: “Estas mochilas no solo les proporcionan una ventana obligatoria, sino que no les permiten alejarse de ella”, añade.

Aunque es posible que algunos gatos estén más acostumbrados a relacionarse con el mundo exterior, haciéndoseles más fácil socializar y lidiar con diferentes entornos o estímulos, para llegar a este punto “el gato debería haber sido expuesto a este tipo de estimulación antes de las 7-9 semanas de vida”.

Y es que los gatos son completamente diferentes a otros animales domésticos, como por ejemplo los perros: “son dos especies muy distintas, sobre todo en cuanto a sociabilidad y características de vida se refiere”. “Aunque algunos gatos puedan vivir en grupo, siempre que los recursos sean suficientes, eso no significa que sean sociales”. Así es que, mientras el perro necesita de una manada o grupo, el gato disfruta de sus momentos de independencia.

Álvarez advierte que no debemos atribuir al gato las cualidades de un perro, aún cuando actualmente nos encontremos gatos que se parecen mucho en cuanto a su comportamiento: “No tiene mucho sentido querer llevarse al gato a todas partes. Siempre estará más a gusto y más seguro en su territorio”.

Sin embargo, cuando las salidas se hacen necesarias, como en el caso de las visitas al veterinario, la etóloga recomienda buscar una alternativa de transporte que le haga sentir seguro y protegido.

El transportín ideal

Para procurar el bienestar de nuestra mascota, debemos esmerarnos por encontrar y adquirir aquellos accesorios que contribuyan a hacerles felices, lo que implica que por muy mono que luzca un gatito asomado en la ventanilla de una mochila no es aconsejable dejarnos llevar por las modas.

En este sentido, la veterinaria señala: “El transportín ideal sería aquel en el que el gato pueda viajar de una manera estable” y para permitirle una mejor experiencia con el veterinario, “también debería poderse abrir en dos partes, la de arriba y la de abajo, de manera que el gato pueda permanecer en la parte inferior para explorarlo”.

Debe tratarse de un sitio ventilado, cómodo, pero sobre todo aislado de los estímulos del exterior: “ese sitio debe permitir que el gato pueda moverse, darse la vuelta o tumbarse. Además se recomienda que durante todo el viaje el gato pueda ver y oír lo menos posible. Cuanto menos expuesto esté al exterior menos estrés sufrirá”.

Asimismo, aconseja educar al felino desde pequeño al medio de transporte, a través de la asociación positiva, con la ayuda del uso de feromonas, elementos como una manta o juguetes que le recuerden el olor de su casa.

Si quieres recibir artículos como este y otras cosas interesantes directamente en tu email…

¡Suscríbete a nuestra newsletter para particulares!

¡Suscríbete a nuestra newsletter para veterinarios!